5 de agosto de 2009

::::::::Francesc Canals Ambrós, "El Santet"::::::::


En el Cementerio del Poblenou existe una tumba que sin duda es la más visitada, es el nicho en el que descansan los restos de Francesc Canals Ambrós, "El Santet", que fue un joven que con apenas 22 años murió en el año 1899, según parece debido a la tuberculosis.
Vivía en la Plaça de la Llana con su familia y su padre, que era ciego, tenía un pequeño negocio de esteras. Francesc poseía fama de buena persona y desde la temprana edad de 14 años trabajó en los "Grandes Almacenes El Siglo".

Los "Grandes Almacenes El Siglo", unos almacenes para clases acomodadas
Tras su muerte, fueron sus compañeras de trabajo las que recordando su carácter caritativo y porque tenía fama de poseer dotes de adivinación, quienes ayudaron a popularizar el hecho de demandar su intercesión a la hora de obrar favores o prodigios. Se dijo que había predicho la fecha de su muerte y el incendio que consumió los almacenes "El Siglo", aunque esto sucedió 33 años después.
Sin duda fruto de la superstición y de la influencia espiritista de la época se generó esa creencia milagrera, siempre que las peticiones no fueran de dinero. 
Un ritual concreto que hoy cumple la fórmula siguiente, el deseo anotado en un papel es introducido por la ranura del cristal de la lápida, después una sentida oración y por la derecha sin mirar atrás, se deja su tumba.
Sólo hace falta ver la cantidad de flores y exvotos que rodean la tumba y que ocupan doce de los nichos de alrededor, que se dejaron vacíos
, para convencerse de que seguimos teniendo los mismos miedos ancestrales que aquella gente de hace más de un siglo.